GRAN OBRA DE UN ENTRENADOR GALÉS EN BEIRUT

TERRY YORATH ENCABEZA EL
RENACIMIENTO LIBANÉS

Dos veces Terry Yorath: DERECHA:en el partido con los jóvenes en Beirut occidental (al fondo el Holiday Inn) y ARRIBA: conversando con la afición.

POR KEITH COOPER
FOTOS: DAVID SPURDENS

Hace tres años, FIFA Magazine informó sobre el renacimiento del fútbol en Líbano a medida que el país se iba recuperando de las prolongadas agonías de la guerra civil. Ahora, el Líbano está a punto de retornar incluso al concierto mundialista, gracias entrenador galés Terry Yorath.

En el mencionado artículo de FIFA Magazine en 1993 sobre el Líbano, Rob Hughes escribió acerca de las nuevas esperanzas que suscitó el torneo clasificatorio de Asia para la Copa Mundial celebrado en Beirut. Fue justamente en aquella época que Terry Yorath fuera polémicamente despedido como entrenador de Gales, sin tener posiblemente la más mínima idea de lo que le depararía su carrera futbolística en el futuro.

Yorath, de 46 años de edad, obtuvo la posibilidad de encargarse de la selección libanesa hace un año. "En abril del año pasado vine a Beirut para echar una mirada a la ciudad y a los futbolistas", nos cuenta. "Pude observar que existen numerosos jugadores técnicamente versados, la federación estaba dispuesta a ofrecerme su ayuda total y la vida en la ciudad no era de lejos tan siniestra como me lo imaginaba. De modo que decidí lanzarme al agua".

Fué una decisión de la que no se arrepintieron ni Yorath, ni la Federación Libanesa de Fútbol, -competentemente dirigida por su presidente Dr. Nabil Al Rae'e-, así como tampoco los aficionados. Bajo la dirección de Yorath, la selección libanesa revitalizada ganó sus primeros nueve partidos, incluyendo victorias contra Chipre, Ecuador y Eslovenia. "Me pregunto si no sería mejor perder al menos un encuentro para que vuelvan todos a la realidad", comenta el entrenador.

No obstante, Yorath Ðquien tuviera una exitosa carrera como jugador en el Leeds United, Coventry City y Gales, y que estuvo a cargo de la selección nacional de este último país durante cinco años- sabe que aún queda mucho por hacer. "Mi predecesor era brasileño y a pesar de haber estado aquí solamente un breve período, fue suficiente para que los jugadores locales quedaran encantados con el estilo brasileño", continúa contando. "Los jugadores tienden a exagerar el jueguito con la pelota y varios de ellos no tienen la condición física necesaria para soportar la presión que supone una competición internacional. Sin embargo, si logro desarrollar enteramente sus habilidades naturales, tendremos un tremendo potencial. Me quedan solamente una o dos posiciones vacantes en la selección y estoy seguro de que viviremos muy buenos momentos en el futuro".

La liga de fútbol de Líbano es un crisol de razas con jugadores originarios de diferentes partes de África y de Asia. "Vinieron varios palestinos, pero son más bien elegibles para su nueva escuadra nacional que para el Líbano", nos explica Yorath, "pero hemos fichado algunos jugadores armenios, arribados hace varios años y que ahora tienen la ciudadanía libanesa. Son los que tienen la mejor mentalidad profesional".
Terry Yorath: "la vida en la ciudad no es tan siniestra como creía".

El éxito de la mezcla multicultural en Líbano y la armonía que existe dentro de la selección nacional son particularmente satisfactorios para el nuevo entrenador. En el club Ansar predominan los musulmanes shiíes, los jugadores del Nejmi son musulmanes suníes y el Hekmi está formado por cristianos maronitas. Sin embargo, cuando todos se reúnen para entrenar -Yorath tiene el lujo de disponer de estos jugadores dos veces a la semana y de los menores de 20 años prácticamente todos los días no existe la más mínima señal de alguna oculta diferencia religiosa.

"A veces los hinchas o funcionarios oficiales de algún club quieren influenciarme para favorecer a sus jugadores", admite Yorath, "pero eso sucede en cualquier parte. Los clubes me apoyan mucho y tengo total libertad de elegir a los jugadores que deseo. Los futbolistas aceptan enteramente que existe una diferencia entre jugar para sus clubes y su país".

LÍBANO
10,452 Km2
225 km. de costa. Fronteras con Siria, Israel y Mediterráneo.
Ciudades: Beirut (1.8 millones), Trípoli (160,000), Zahleh (45,000), Sidón (38,000).
Población: 3.8 millones (96% Árabes); 65% Musulmanes, 34.8% Cristianos, 0,2% Judíos
Federación Libanesa de Fútbol:
Fundada en 1933, afiliada a la FIFA en 1935.
Jugadores registrados: 12,800
Clubes registrados: 108
Árbitros registrados: 94
Entrenadores diplomados: 34
Temporada: de septiembre a mayo

La vida entre las ruinas de una ciudad que sigue recogiendo los restos de 17 años de desoladoras hostilidades es menos amenazante de lo que aparenta, aunque la mujer de Yorath y sus tres hijos prefieren seguir viviendo en Inglaterra y visitarlo regularmente en su nuevo ambiente de trabajo. La situación en esta otrora idílica ciudad situada en la costa oriental del Mediterráneo, capital de un país que en épocas pasadas se apodaba la "Suiza del Oriente", está volviendo lentamente a la normalidad y el problema más grande de la actualidad no es la amenaza de violencia en las calles, sino los embotellamientos de tráfico.

En la ciudad existen cuatro terrenos de juego con césped y un estadio con una capacidad para 60,000 espectadores sentados, que se finalizará de construir a fines de junio, justo a tiempo para los Juegos Panarábicos en setiembre. Estos Juegos deberían ser igualmente una prueba elocuente para el resto del mundo que Líbano está efectivamente de retorno en el concierto del deporte internacional.

"La mayoría de los partidos se juegan aquí en estadios repletos y todos están convencidos de que lograremos llegar a la final de la Copa Asiática que se disputará en los Emiratos Árabes Unidos en diciembre próximo", informa Terry Yorath. "En nuestro grupo de clasificación para el Mundial, tendremos que enfrentarnos a Singapur y a Kuwait, que también está armando de nuevo a su selección después de las hostilidades de algunos años atrás. Estoy seguro de que lograremos imponernos, lo cual será un tremendo impulso para el fútbol en este país".

Significaría, además, la prolongación de su contrato que vence en setiembre y que depende asimismo de la clasificación en la Copa Asiática. Tras sufrir una tragedia personal con la muerte de su hijo en pleno partido de fútbol en 1992, Terry Yorath está armando valientemente su propia vida, junto con la del fútbol libanés. Hasta la fecha, ambos están progresando.

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