Mujeres cosmopolitas

Desde los comienzos de su historia hasta avanzado el siglo XX, el fútbol era exclusivamente un dominio reservado para los hombres.

Sin duda alguna, la impetuosidad de los inicios del fútbol no tuvo gran atracción para las mujeres. La razón principal de la ausencia femenina residió en el predominio masculino, que en casi todas las sociedades truncaba ese tímido entusiasmo que algunas mujeres osaban manifestar por ese deporte que comenzaba a adquirir una fuerza social cada vez mayor en el siglo XIX. La emancipación gradual de las mujeres en el siglo XX otorgó al sexo femenino la posibilidad de realizarse cada vez más en diferentes ámbitos de la vida, así también en el fútbol. En las dos últimas décadas, el fútbol femenino se ha convertido en una parte integrante del movimiento deportivo, el cual sería inconcebible sin esta realidad. La FIFA reaccionó ante esta tendencia y cumplió con la promesa expresada por el Presidente João Havelange en el Congreso de la FIFA de 1986, en México, de organizar una Copa Mundial para mujeres. La calidad del evento y el entusiasmo que suscitó la primera Copa Mundial de 1991 en China probó que la FIFA tenía razón. Las muchachas norteamericanas ganaron merecidamente el título y pusieron nuevos hitos para sus compañeras en todo el mundo. Cuatro años más tarde en Suecia, las noruegas se llevaron el máximo galardón.

En EEUU, un 40% de las personas que juegan al fútbol son mujeres. La participación en Europa del Norte y en el Lejano Oriente es también muy alta. En todo el mundo, unos 30 millones de mujeres y niñas luchan por el esférico, combinando la elegancia femenina con la dinámica y la habilidad técnica.

Las reservas de antaño - por ejemplo riesgos físicos para las futbolistas - pertenecen ya al pasado. La próxima Copa Mundial Femenina de la FIFA, que se celebrará en EEUU en 1999, y el Torneo Olímpico de Fútbol Femenino, introducido en Atlanta 1996, ocupan un lugar fijo en las competiciones de la FIFA.

Referencias:

  • FIFA Magazine October 1995